Si algo me define es que no sé quedarme quieto. Siempre he sido alguien que busca estar en movimiento, aprendiendo, creando, explorando nuevas ideas y poniéndome bajo presión para crecer.

Mi primer acercamiento al emprendimiento fue con una marca de ropa que construí desde cero. Aunque por falta de experiencia el proyecto no sobrevivió, fue ahí donde aprendí más de lo que cualquier éxito temprano me habría enseñado. En lugar de detenerme, decidí seguir explorando caminos donde pudiera conectar mi creatividad con soluciones reales.

Lancé un negocio de diseño 3D enfocado en artistas musicales emergentes, combinando dos de mis grandes pasiones: el arte y la música. Crear visuales con propósito, que cuenten una historia, me hizo enamorarme aún más del poder de lo visual para transmitir emociones.

Hoy, trabajo en una agencia de publicidad, y fue ahí donde descubrí otra pasión: la construcción de marcas. Me motiva profundamente crear identidad de marca auténtica, guiar a las personas a descubrir quiénes son como negocio y traducirlo en contenido que conecte.

Me inspira lo minimalista, lo que comunica mucho con poco. Disfruto crear piezas visuales limpias, estrategias que tienen intención, y hasta rediseñar espacios, porque para mí, todo lo que te rodea comunica algo. Y si se puede transformar, mejor.

Soy alguien que trabaja, que se adapta, que busca aportar, y que encuentra inspiración en las buenas historias. Estoy en ese punto donde la visión ya está clara: crear, construir y ayudar a otros a dejar su huella con autenticidad.